¿Sabían que existe tecnología para entrar al metro, al cine, a un concierto, comprar ropa, un regalo, el supermercado o poner combustible pagando con el teléfono móvil? Los usuarios de Uber lo saben, y será tan sencillo como abrir una “apps”, cargar combustible y, paso tres, hacer la transferencia. Podrá usar una “apps” de una casa comercial, de un empresa tecnológica o cualquiera que le acomode. Se podría comprar y pagar bastante tipo de cosas usando el celular.
El Comercio (grande y pequeño), las Cajas de Compensación, los bancos, las empresas de servicio, etc, esperan que sea Ley el proyecto que da un soporte legal a todo esta operación. Está en último trámite en el Senado, pero que volvió a la Comisión de Hacienda, esperando una indicación del Gobierno para ver de qué forma puede entrar como proveedor de pagos electrónicos la BIP: es decir, no sólo abrir los torniquetes del tren subterráneo con la tarjeta, sino además pagar cosas; y al rreves, según se dijo en Sala, abrir los acceso al Metro con el teléfono móvil.
¿Por qué es tan importante? Primero, porque es fuente de innovación y desarrollo tecnológico. Segundo, porque es más seguro que andar con billetes. Tercero, permite a sectores de ingresos más bajos entrar usar medios de pagos electrónicos. Y cuarto, puede generar un caudal de valor agregado, como un rastreador de estos pagos, u ofertas dirigidas a públicos específicos: se puede hacer un tracking de todos los pagos electrónicos en empresas de transporte, que ayuda al control de gestión e inteligencia de negocios a quienes las administran; o se pueden mandar ofertas específicas a las personas, dado su patrón de consumo. Lo anterior con los resguardos en cuanto a la privacidad de los datos.
En el World Congress Mobile 2016 de Barcelona, una de las vedette tecnológicas fueron los medios de pagos. Apple , Google o Samsung, ya están con todo, y las grandes entidades corren a toda prisa para tener preparadas sus aplicaciones 'wallet'. En España BBVA, Santander o Bankia ya han lanzado su servicio. Google Wallet, PayPal, Samsung Pay u otros están disponibles.
Es decir, hay tecnología para que emprendedores chilenos puedan entrar a proveer este servicio en Chile, sea con desarrollo local o adaptando algunos servicios globales. Y esto de forma rápida, simple, cómoda y muy segura. Pero , creo, el Senado ha enredado las cosas, volviendo a discutir el proyecto para que ingrese el Metro de Santiago. Parece, a primera vista, interesante que las millones de tarjeta BIP se abran para pagar otras cosas además del transporte, pero hay varios detalles por resolver. Es de esperar que no retrase esta futura Ley, que tantos beneficios traerá.